Una excavadora que recoge escombros. Un helicóptero que, por una gran suma de dinero, llega a los rincones más inhóspitos. Casas de madera que se levantan unos metros más alejadas del mar. Tiempo y dinero que se acaban. Aún se sienten los daños que produjo el terremoto, daños evaluados en más de 30.000 millones de dólares. Dos meses después el país más alargado del mundo se levanta, y no sólo en los lugares afectados, también en el ciberespacio.
La Asociación Chilena de Desarrolladores de Videojuegos A.G., en colaboración con Unicef, ha desarrollado un videojuego para ayudar a los afectados por el seísmo. El proyecto denominado ‘Reconstruir Chile’, que se colgó en la web hace algo más de una semana, ha sido llevado a cabo en su totalidad por diseñadores e informáticos chilenos.
Terminar con los escombros
El objetivo cibernético de ‘Reconstruir Chile’ consiste en recoger los escombros lo más rápido que se pueda. Si no pasa demasiado tiempo, y no se utilizan recursos extra, como el helicóptero, se obtiene una medalla de oro. Si transcurre algo más y se acaba el presupuesto, una de plata. Si se termina todo el dinero, se acabó la tarea de reconstrucción.
Los objetivos reales del videojuego son otros. Álvaro Quezada, uno de sus diseñadores, reconoce que: «Queremos que tenga la mayor difusión posible y que se haga conocido en todo el mundo. Para esto ya contamos con el apoyo de importantísimas instituciones, en primer lugar Unicef, pero también con portales especializados».
«Al proyecto se sumó mucha gente de manera desinteresada, aportando ideas e incluso muchas horas de trabajo voluntario» declara el diseñador. «La idea era crear un juego para recaudar donaciones y llegar al millón de dólares», añade.
El trabajo finalmente da sus frutos. «Fue un tema delicado encontrar una mecánica y estilo de juego sobre un tema doloroso para todos, como era la catástrofe del terremoto. Nos dimos cuenta de que la misión era transmitir esperanza y un mensaje de que con trabajo y esfuerzo todo se puede lograr, incluso reconstruir un país», manifiesta uno de los diseñadores del videojuego.
El programa informático, que está siendo todo un éxito, posee varias formas de recaudar fondos. La primera es jugando y contando a amigos y a conocidos lo divertido que es este entretenimiento. A mayor circulación en las redes sociales, mayor incremento de los beneficios gracias a la publicidad.
La segunda forma es comprar, por un precio económico, alguna de las versiones de pago del juego. Ya existe un modelo para iPhone y en los próximos días saldrán otros para la videoconsola Xbox y para Windows. La tercera manera, más directa, consiste en hacer una donación a Unicef.
Adictos por una buena causa
Mario es uno de los miles de aficionados a ‘Rebuild Chile’. Lleva todo el día vendiendo periódicos, revistas y chocolatinas en su quiosco de la calle Monjitas, en el centro de Santiago. Después de diez horas de duro trabajo, y antes de llegar a casa, el quiosquero se pasa por un cibercentro cercano a jugar un rato al videojuego.
«A mí me encanta, es el típico juego de plataformas con el que se te pasa el tiempo volando. Además ayudo a mi país, así que vengo todos los días un ratito, me lo paso cinco o seis pantallas y me voy a casa», reconoce Mario. «No sé si existe algo así dedicado a Haití, pero sería una muy buena idea hacer lo mismo», añade el joven.
La hermana del quiosquero está algo más enganchada a ‘Rebuild Chile’. «Se lo dije a mi hermana Carolina y se conectó ‘al tiro’. Me contó que hasta que no se pasó las treinta pantallas no pudo apagar el computador, casi la echan del trabajo», explica Mario. El que quiera ayudar a reconstruir Chile, real o cibernéticamente, que entre en www.rebuildchilegame.com.
Por: Jorge Barreno
Publicado en: www.elmundo.es
