¿Tienen algo que ver los mantras, las oraciones, con los negocios? Mucho, si es que queremos que sean exitosos.
Mantra es una palabra de origen sánscrito que significa “herramienta de la mente”. Un mantra tiene la forma de sonidos, palabras, a veces en forma de salmodia, cuyo fin es atraer lo que se desea y liberar a la mente del peso de los pensamientos improductivos. Según la metafísica hindú todo está hecho de sonido, vibraciones, y cada cosa contiene una representación simbólica de las energía que la componen; eso es el sonido “semilla” o raíz, bija mantra. La intención de los mantras es la de poner a la persona que lo pronuncia en resonancia con el objetivo cuyo sonido raíz ha invocado. En el budismo es muy conocido el mantra Om, cuya resonancia nos pone en comunión con el universo.
En el occidente los mantras tienen su equivalente en los switchwords o palabras claves, cuyo significado y efecto es el mismo que en el oriente. Se trata de palabras claves quer al ser invocadas permiten acceder a lo deseado. No es cualquier palabra; son sonidos estudiados para provocar los efectos perseguidos. Si desea saber más, vea http://www.mindpowernews.com/Switchwords.htm y también http://amodernview.blogspot.com/2007/11/switchwords-tool-for-your-use.html.
Recitar un swithword tiene su técnica. Debe hacerse concentrado en la palabra, de manera que su repetición logre dos efectos: conectarnos sicológicamente con lo deseado, y reemplazar en la mente ese rosario de pensamientos que nos invaden sin que los llamemos, muchos de ellos negativos. Puede hacerse en cualquier momento del día, en cualquier lugar. La repetición puede incluir muchas veces la palabra, digamos unas cien, y la manera más eficiente es en forma de salmodia, poniendo ritmo a la misma.
¿Cuáles son esas palabras? En uno de los links relativos a los switchwords se muestra una lista de acuerdo al tipo de deseo que se tenga. Por ejemplo, si deseamos hacer dinero la palabra sería COUNT. Repitamos COUNT muchas veces, como rezando, y veremos que de alguna manera el dinero nos llega. Esto no es nuevo y los constructores de grandes fortunas lo saben y practican; cuando desean fervientemente algo, repiten la palabra mágica en forma de mantra y terminan obteniéndolo. ¿Es la palabra la mágica? No. Es la actitud del que la recita. Al hacerlo, pone en marcha todas sus potencialidades y termina obteniendo lo que persigue. Es el efecto que obtiene un deportista que corre pensando “Voy a ganar!”. La palabra tiene que ser corta, tajante, enfocada, de manera que se establezca claramente la relación entre ella y lo deseado. La mente no puede entretenerse en frases, porque se corta el link perseguido. El idioma no importa, pero ya están probadas las fórmulas en inglés así que ¿para qué inventar la pólvora nuevamente?
Para los aficionados a estudiar o informarse de los recursos místicos, esto es la base de la llamada Ley de la Atracción.
¿Tiene lógica este fenómeno? En la medida de que compartimos la visión de que la mente humana domina al cuerpo, y que es un programa similar a los de computación (visión de la serie Matrix, del cine), tiene lógica. El mantra o switchword sería el equivalente a un driver, un acto o una subrutina o algo que gatilla los recursos del programa para obtener lo definido en sus instrucciones. En este caso, en sentido positivo (¡Voy a lograrlo!) o negativo (¡Nunca lo lograré!).
¿Cree que le puede servir para sus negocios? ¡Por supuesto! Con solamente calmar la mente y despejarla de pensamientos insanos, ya tiene una gran ganancia. Si a eso agrega que con el mantra o switchword está llamando a todas las energías de Universo para que lo ayuden… ¿por qué no probar siquiera?
Ya lo sabe: en lugar de perder el tiempo en pensar en las dificultades de lograr tal o cual negocio, ¿por qué no lo usa en recitar cadenciosamente la palabra FIGHT para enfocar todas sus energías en doblegar al que se lo dificulta, su competencia? Por lo menos es un tiempo mejor usado…
Fuente: http://4grandesverdades.wordpress.com